Salón de estética
La limpieza y el orden en la distribución de los espacios en este salón de estética son elementos necesarios para la ejecución y disfrute de un tratamiento de belleza en todos sus estadios. Atendiendo a esta premisa, la luz y el orden se imponen en un espacio diáfano y claro donde los volúmenes describen sutiles parábolas, contrastando las líneas rectas con las curvas. La zona de cabinas, adquiere una fuerte personalidad mediante el uso de colores pastel y el apoyo de una gráfica impactante, además de una distribución racional equiparable a un equipamiento clínico.
El mobiliario escogido para la ocasión y su distribución atiende sin dudas a las mismas premisas de claridad y orden, además de aportar pequeñas pinceladas cromáticas cargadas de fuerte armonía y un aspecto futurista y evocador.